El pasado jueves, con motivo del final del mes del Ramadán, en Elin quisimos hacer una celebración especial.
Esta familia la formamos personas de muy diferentes culturas y religiones, pero hay algo común entre todos y todas: EL RESPETO Y LA IGUALDAD.
Comenzamos con una actividad de intercambio y conocimiento en la que debíamos preguntar a nuestros amigos musulmanes qué significaba el Ramadán para ellos, cómo habían vivido este periodo, qué les había aportado en su relación con Dios o qué momentos eran los más importantes para ellos. De esta manera construimos un momento muy especial en el que todos participamos, escuchamos, compartimos, expresamos y aprendimos.
A continuación, tuvimos una emocionante sesión de baile en la que disfrutamos comiendo y bebiendo.
El baile, ese lenguaje que no entiende de idiomas, de culturas o de diferencias, sino que iguala y conecta a las personas.
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